La actriz y bailarina está transitando el aislamiento obligatorio en soledad.
Flor Vigna es una de las figuras más destacadas de nuestro país. Luego de participar del reality show ‘Combate’, en el que agigantó su fama considerablemente, la intérprete se sumó a ‘ShowMatch‘ como una de las bailarinas del ciclo. Sin embargo, la actriz generó mucho reconocimiento, al punto de convertirse en uno de los personajes más interesantes del certamen. En la actualidad, la mediática está transitando la cuarentena en soledad, esperando volver a trabajar.
Para aprovechar su tiempo libre, la joven está aprendiendo piano, una actividad que le resulta muy gratificante. Horas atrás, por medio de sus historias de Instagram, Flor Vigna le hizo un pedido a sus seguidores, para que la ayudaran a ponerle un nombre a su instrumento. “Creo que ya está claro a esta altura que no me sé peinar y que estoy media friki. A la par de esto, le pongo nombre a las cosas”, empezó diciendo la influencer.
“Ya les conté que mi heladera se llama Marta, mi módem se llama Rolo. Y él, mi piano tiene que tener un nombre. No miren el desorden. Vos tenés que tener un nombre glorioso. A mí se me ocurrió uno, que es Benito. Para mí, tiene cara de Benito. Después me acorde del chiste de ‘Benito camela’ y dije ‘qué garrón, qué guarango’. Pero después pensé en ‘Benito came la tecla’. Como que el piano me invite a tocarlo, a aprender, a ejercitar. ¿Da, o es medio malo?”, indagó la bailarina.
Luego, sus seguidores le propusieron varios nombres para denominar a su piano. Fito, Ermenegildo y Anatecla fueron algunas de las respuesta que leyó. Sin embargo, Flor Vigna hizo una aclaración. “Me gusta Anatecla, me gusta. Me han puesto Magnolia y otros nombres hermosos de mujer también. Que esto no se interprete como machista, pero yo siento que el piano es un chabón, ja. Es un piano, claramente, pero cuando estás sola, los objetos tienen vida”, declaró.
Para finalizar, la rubia respondió otro interrogante. “¿Por qué le ponés nombres a los objetos, Flor? Lorenzo podría ser”, le escribió un fanático. “Querido Jonathan de Berazategui, cuando pasás la cuarentena, que se transforma en una cientena, sola, le empezás a hablar a las cosas. Y las cosas tienen que tener un nombre. Es como que yo tengo una relación con todos los objetos inanimados de mi casa“, contestó Flor.